Hoy se termina otro año. Y con el nacen nuevas dudas, nuevos desafíos y nuevas experiencias. Todo traerá nuevos aprendizajes y creo que habrá que hacerles frente d ella mejor manera posible. Al menos esta noche, estoy tranquilo. Sé que no estoy solo. Sé que debo soltar lo que no puedo controlar, para asumir nuevos desafíos más arduos aún.
Pero no estoy solo, eso me basta.
Tengo que ordenar muchas cosas dentro de mi cabeza, en el corazón. Sistematizar todo aquello que he vivido y aprendido. Espero no fracasar tan a menudo. Espero llegar al final de la meta.
Sé que nunca termino conformo con lo que logro cada año, nunca m conformado con lo que soy, con lo que hago. Pero trato de aprovechar esa sensación para seguir mejorando, con todas mis fuerzas.
Sé que debo cuidarme un poco más. Sé que me excedo a rato con las presiones, temo que eso me pase la cuenta un día de estos pero ahí hay otro desafío precisamente.
Estoy fallando a ratos, le he fallado a algunas personas también. Procuro mantener la distancia mientras permanece en mi una fuerte anhedonia y un tentadora sensación de misantropía.
Pero veo nuevos horizontes, y mis convicciones, que si bien no son muchas, siguen firmes y así espero que sigan, hasta el final de mis días.
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